Hacking. Mis contraseñas son solo mías.

En muchas ocasiones no somos conscientes del valor que tienen las contraseñas como llaves que pueden cerrar o abrir las puertas de su intimidad. La privacidad en todos los lugares personales de Internet -como los perfiles en las redes sociales­ está guardada por una contraseña, que es un conjunto de letras, signos y números que forman un código secreto destinado a proteger nuestra identidad.

Los hackers -no confundir con los cibercriminales- son «apasionados» de la seguridad informática, investigadores que buscan las vulnerabilidades existentes en programas y sistemas informáticos que permiten acceder a sus datos sin el consentimiento previo del titular, como por ejemplo las vulnerabilidades producidas por el mal uso de contraseñas. Por desgracia, a algunos menores también les gusta hacer sus tentativas en la vulneración de contraseñas y acceder a los perfiles de redes sociales de amigos o conocidos sin su consentimiento.

¿Es lo mismo un hacker que un ciberdelincuente? En nuestra opinión, no. El término hacker se ha asociado equivocadamente a delincuencia, cuando no es correcto. Podemos decir que el hacker busca errores de seguridad para solucionarlos, y el cracker, o ciberdelincuente, busca esos mismos errores con alguna finalidad delictiva o de lucro propio. La diferencia entre unos y otros surge según los propósitos con los que se utilicen los conocimientos en seguridad informática que poseen, bien con buenos propósitos (para mejorar la seguridad), o con malos (con la intención de perjudicar a alguien invadiendo su intimidad).